martes, 20 de abril de 2010

Cómo prestigiar un premio


Así funciona el Premio Nobel de la Paz. Siempre fue un instrumento de política exterior tanto o más que un reconocimiento. A veces pone el foco en un conflicto que a su juicio no recibe la atención que merece y premian a una activista como la birmana Aug Suu Kyi o el argentino Adolfo Pérez Esquivel, que luchan contra un régimen opresivo a través de la resistencia pacífica. A veces premia a una organización que hace las cosas bien como Amnesty o Unicef.


La nota de Santiago (el más copado de los) O'Donell pone en buena dimensión el significado del tan mentado premio. Y hete aquí que la candidatura de las Abuelas no hace más que prestigiar al premio y no al revés. Sobre todo después de habérselo entregado a alguien más polémico que Polémico Moreno.

2 comentarios:

  1. Sí, igual después de entregárselo al polémico perdió toda credibilidad (si alguna vez tuvo). En caso de que se concrete efectivamente, bienvenido. También había leído por ahí la nominación para El Evo.
    Por eso me parece que es medio una cosa para la gilada, no? Digo, lo del premio...

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  2. Sí, como se dice generalmente a Feinmann le cabió.
    La causa también va contra el entonces Ministro del Interior, ahora Jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Según fuentes del PO hasta ahora no se le pudo notificar porque no tiene un domicilio inscripto... ju ju...

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